Estar día a día en lo más de 2 millones de paladares es una realidad que engloba diversos eslabones importantes en una larga cadena de tareas y procesos que implican un incalculable número de individuos que de manera indirecta participan en alguna etapa del proceso, el cual inicia a bordo de un barco tripulado que viaja durante varias semanas.
Desde la antigüedad, la pesca ha sido una fuente importante de alimentos y de empleo para la humanidad, así como de beneficios económicos para quienes se dedican a esta actividad.
Desde México prehispánico, la pesca era una tarea realizada por los habitantes para auto proveerse de alimento. Así como la recolección de frutos de la tierra y la caza de diferentes especies, la pesca fue una actividad importante para el sustento. Los pobladores del México prehispánico practicaban la pesca marítima de diversas especies, pero los pueblos aztecas y tarascos eran quienes más se beneficiaban de la pesca en los lagos cercanos a su territorio.
Durante la Colonia, se desarrollaron diversas técnicas de pesca, sin embargo, existían múltiples limitaciones, desde la captura hasta la distribución de las especies. El consumo se centraba principalmente entre los habitantes de zonas cercanas a la costa, lagos y ríos.
A mediados y finales del siglo XIX, México comenzó a regular la pesca de agua dulce y salada, creando diversas comisiones para la conservación, desarrollo, organización y fomento del sector pesquero, pero fue hasta ell siglo XX donde la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN) inauguraron el Instituto de Ciencias del Mar y se modernizaron las las leyes pesqueras, dando mayor jerarquía a las instituciones del gobierno encargadas de su administración y fomento.
A partir de 1970, el gobierno mexicano comienza a impulsar la actividad pesquera creando la Subsecretaría de Pesca, promulgando el Plan Nacional de Desarrollo Pesquero y la concentración de diversos esfuerzos que estimulan esta actividad.Simultáneamente, México se suma a la campaña de Chile, Venezuela y Ecuador proclamando la soberanía de un país sobre una extensión de mar de 200 millas náuticas (Mar Patrimonial), el cual concluye en 1976 con la promulgación del decreto en el que se establece dicha extensión como zona económica y de explotación exclusiva del país.
Pesca de Atún en el Mundo:
Durante siglos, la pesca de atún se realizaba con cañas hechas con una vara de bambú y un anzuelo. Los barcos zarpaban para pescar sardinas vivas, las almacenaban en un tanque con agua de mar y posteriormente salían en busca del atún. Al encontrarlo, usaban la sardina viva como anzuelo y atrapaban a los atunes que se enganchaban fácilmente, para después extraerlos y colocarlos en la popa del barco.
Aunque pareciera un método rudimentario por el hecho de realizarse de forma manual, fue tan eficiente que los barcos atuneros de entonces, en viajes de 60 días, llegaron a capturar entre 50 y 300 toneladas, produciendo suficiente pescado para enlatarlo industrialmente.
Siendo la pesca una actividad de tradición milenaria, la captura masiva del atún es relativamente reciente y se atribuye principalmente al avance tecnológico para producir, en los sesenta, artes de pesca facilitadoras de esta actividad en escalas industriales. También es importante mencionar que el tejido de las redes con fibras sintéticas, como el nylon, aumenta considerablemente su resistencia al peso y desgaste.